Reciclado del polietileno

Daremos un pequeño giro respecto de nuestros temas habituales sobre el polietileno, y hablaremos un poco de una industria que se empieza a fortalecer en todo el mundo que gira alrededor del reciclado de este material.

Vivimos en una sociedad que cada día se vuelve más consciente de la necesidad de cuidar el medio ambiente. El reciclado de plásticos va de la mano con esta conciencia creciente en la humanidad de seguir dándole vida útil a los polímeros sea cual sea su presentación y aplicación. Este tipo de situación abarca prácticamente cualquier empresa que trabaje con plásticos, ya sea la de los automóviles, construcción, la envasadora, deportiva, etcétera.

El plástico ciertamente nos ha facilitado la vida en todos los aspectos posibles, no hay aspecto en el que no exista el plástico ayudándonos a tareas diarias, pero dentro de este uso generalizado también viene la penitencia de su uso no regulado, desmedido y la manera en la que lo desechamos afectando ni más ni menos que la casa de la humanidad.

Las ventajas que el plástico nos representa las podemos ver reflejadas en un automóvil, en promedio en un automóvil del 15% al 20% de un vehículo es plástico, esto implica que los plásticos ayudan a que se ahorre gasolina por su ligereza y a la vez emisiones de CO2 se reducen, pero una vez que el auto se desecha, ¿adónde se va todo ese plástico?

La industria de los reciclados de plástico es un sector que va en franco crecimiento. Se calcula que en Europa esta industria ha creado alrededor de 160,000 empleos hasta el 2020, dado que se puso la meta de mantener una tasa del 70% del reciclado de este material. 

Otro rubro hacia donde los plásticos están también abarcando interés en su reciclaje es en el de la producción de combustible, esto es debido a que el poder energético que tienen es similar al del gas natural y mejor que el carbón, por poner un ejemplo. De aquí la pregunta sobre por qué se desechan si incluso se pueden aprovechar como energía. Se deben empezar a implementar políticas públicas en todo el mundo que regulen no solo el reciclado material sino su reutilización energética.

Debemos involucrar a la ciudadanía a la vez para lograr estos objetivos y que las tasas de reciclado se conviertan en una tasa del 100%, o sea una política de no desperdicio. 

La investigación en aplicaciones finales para el plástico reciclado debe continuar para que estas sean sustentables y eficientes con el paso del tiempo, de modo que el componente energético y el ambiental vayan de la mano y de ese modo evitar que los plásticos terminen en vertederos, o peor aun, en el mar, o contaminando otros parajes naturales debido a una falta de visión en su reutilización.

Un ejemplo son las tuberías de polietileno recicladas, muchas de estas se reutilizan en riego agrícola o en redes de saneamiento y drenaje.

La ventaja de los plásticos en general es que al final de su vida útil siguen siendo un recurso aprovechable gracias a todos los procesos que pueden sufrir mediante el reciclaje, y se pueden convertir en una nueva materia prima o se utilizarán como energéticos expandiendo su aprovechamiento y evitando su desperdicio.

En Soldaplas contamos con todo tipo de material plástico, así como el equipo necesario para su extrusión, termofusión y manipulación, no dudes en contactar a nuestro equipo de expertos.

Usos de las tuberías de polietileno

Hoy en día las tuberías de polietileno o plástico han ampliado su campo de trabajo a prácticamente todas las necesidades urbanas e industriales en cuanto al tratamiento y transporte del agua. Desde la captación y depuración hasta la desalinización, así como la distribución de la misma para uso doméstico o para tratamiento. He aquí algunos ejemplos.

Las plantas de desalinización hacen uso de este tipo de tubería tanto para el tratamiento del agua como para la evacuación de los residuos del agua salada conocida como salmuera.

En cuanto a la función que desarrollan las tuberías de plástico en suministro y distribución de agua potable, es ya una constante a nivel mundial. Este sector fue de los primeros en usar tubería de polietileno gracias a la elasticidad, flexibilidad, resistencia y confiabilidad. Gracias al interior liso de la tubería se evita que se generen incrustaciones dentro del mismo tubo, de modo que las pérdidas por rozamiento bajan de manera drástica comparado con otro tipo de materiales. Este tipo de tubería es de uso común para poblaciones en general, red de distribución, etcétera.

En cuanto al tratamiento de agua no potable, las tuberías de polietileno que se utilizan para este propósito las podemos identificar por el color negro con bandas moradas o cafés, y así hacer la diferencia de las que se usan para agua potable. Por estas pasan el agua depurada y se llevan a zonas de riego de agricultura y jardines.

Hay varias razones de peso para que todo el sistema de tuberías tanto para trata del agua, desalinización, depuración, distribución y otras tareas haya cambiado a tuberías de polietileno dejando atrás las de hormigón y otros materiales. De entrada, las razones económicas salen a relucir gracias a que este tipo de tubería al ser de fácil manejo, transporte y montaje representan un ahorro en costos y tiempo. Asimismo, las características físicas de las tuberías ayudan a que el impacto ambiental sea mucho menor. Este tipo de tubería tiene mucha mayor facilidad de conexión para ampliar las redes cuando sea necesario. La durabilidad del mismo material, el hecho de que no sea susceptible a la corrosión permite que se pueden emplear de manera confiable por largos periodos de tiempo, en promedio hasta 100 años, lo cual también logra reducciones en costos, mano de obra, mantenimiento y ahorro de recursos.

Nos permiten estar más confiados en cuanto al factor confiabilidad, dado que las pérdidas por fugas son raras, por lo tanto, las filtraciones y contaminación del suelo es casi imposible, de modo que el agua transportada se mantiene bajo las condiciones ideales sea cual sea la tarea.

Por último, todo este tipo de materiales puede ser reciclado, de modo que no se desperdicia y se puede transformar en productos nuevos, o estos pueden convertirse en nuevas fuentes de energía. Podemos decir que las tuberías de polietileno nos generan confiabilidad, así como la tranquilidad de que el impacto medio ambiental sea mínimo en su uso y nos permiten tener un suministro de agua eficiente y seguro. 

En Soldaplas contamos con tuberías de polietileno para todo el tipo de trabajo que requieras. No dudes en contactarnos, nuestro equipo de expertos resolverá todas las dudas que tengas al respecto.

Tubos plásticos para saneamiento

Cuando se utilizan tubos plásticos en el tema de saneamiento, la estanquidad es el parámetro central. Las pruebas a las que se someten estos tubos son a ensayos de estanquidad con aplastamiento y desviaciones angulares para probar las uniones en los tubos. He aquí algunas de las pruebas a las que estos tubos deberán ser sometidos.

Los tubos para saneamiento serán probados en su resistencia a la abrasión, esto es debido a que en las aguas residuales y pluviales que circulan por las redes de saneamiento es común encontrar sólidos, de ahí que se deba considerar su resistencia a la abrasión. El método con el que se ponen a prueba consiste en someter un tubo de 1 m de longitud a 400,000 ciclos, sometiéndose a agua con arena y grava y terminados los ciclos se medirá la pérdida de espesor de la pared.

Estos tubos también deberán ser resistentes a la corrosión y deterioro químico. En general, el deterioro químico más común se da por sulfuros, siendo los tubos hechos a base de hormigón los más susceptibles a este deterioro; los tubos de plástico son resistentes a los sulfuros. 

En general, los tubos de plástico tienen una resistencia química mayor a los de hormigón o cemento, esto es debido a que las juntas de los tubos están fabricadas con materiales llamados elastómeros a base de caucho natural. 

Otra característica de resistencia es la menor pérdida de carga por rozamiento, esto da pie a mayor flujo con el mismo diámetro interior de los tubos, esto se traduce en que a igualdad de diámetro interior la pendiente necesaria para evacuar el mismo caudal en un tubo de hormigón es de 2.4 veces la de un tubo plástico. Otra ventaja de los tubos de plástico es que la rugosidad que presentan los tubos de hormigón y de metal hacen que puedan irse haciendo adherencias e incrustaciones y así reduciendo el diámetro a lo largo de su vida útil. 

Todos los tubos plásticos son de baja densidad, esto quiere decir que son ligeros, y da como resultado mayor facilidad de transporte, ahorro en costos de maquinaria para manipularlos y mayores rendimientos en su funcionamiento. Gracias a su ligereza, los tubos de plástico suelen instalarse hasta cinco veces más rápido que los de hormigón, tomando en cuenta que además los tubos de hormigón suelen ser más cortos que los de plástico debido a que son mucho más pesados.

Para finalizar, el precio de los tubos sumado al costo de su instalación es también una gran ventaja con respecto a los de hormigón, lo cual vuelve a los tubos de plástico en términos prácticos mejor inversión a la hora de usarlos como tubería para saneamiento.

En Soldaplas contamos con tubos de plástico de todo tipo dependiendo el trabajo que desees realizar, no dudes en contactarnos, nuestro equipo de expertos podrá asesorarte y despejar tus dudas.

Instalaciones de tuberías de polietileno

Cuando tratamos el tema de la instalación de tuberías de polietileno se deberán seguir códigos de procedimiento bastante específicos: no solo es importante la calidad del material sino que la instalación de esta es el otro 50 % del trabajo. Veamos los aspectos que ello implica.

El primer factor para considerar es el de la rigidez del tubo, aquí es donde llegan a suceder desviaciones en la instalación: entre mayor rigidez del tubo menos fallos habrá en la instalación, afectando esto en mayor o menor medida su buen funcionamiento y, por lo tanto, que su uso pueda ser por más tiempo. Cabe señalar que en cuanto a la rigidez anular se espera un aumento de la deflexión después de un periodo corto de tiempo, esto va en función del suelo y las condiciones de la obra.

Los tubos de polietileno poseen una característica excepcional en cuanto a su capacidad de descarga, a veces la deformación de estos puede provocar reducción en su capacidad de descarga y estanquidad, pero se tiene un margen de maniobra de hasta el 10% en sus deflexiones, ya que una deformidad de este porcentaje solo reduce en un 2% su capacidad de descarga.

De hecho, se tiene estimado que la deflexión de un tubo flexible se controla por el asentamiento del suelo, una vez pasado este punto el tráfico o el terreno no deformarán el tubo, si tenemos un tubo más rígido que el suelo la carga de tráfico la resiste el tubo mismo.

La rigidez anular de los tubos se considera en función de la profundidad a la que se vayan a enterrar, el tipo de terreno y las cargas móviles, considerando así el suelo, si es una zona verde, patios, calles, pasajes, zonas de tránsito, autopistas o carreteras. 

Para tuberías de saneamiento es preferible usar tubos más flexibles que rígidos, también ayuda a que el impacto al medio ambiente sea menos con tubería flexible debido a que los defectos o fracturas en tubos flexibles son menores que en rígidos. Las filtraciones en un tubo flexible bajan hasta en un 25% con respecto a la tubería rígida. 

Como vemos, el conocimiento adecuado en la instalación de tubería es vital para hacer un uso adecuado de los mismos dependiendo de la tarea que se le vaya a dar. Es fundamental que los instaladores sean conocedores y especialistas formados en la materia para que estos cumplan su función a largo plazo.

En Soldaplas contamos con toda la información necesaria en cuanto a tuberías de polietileno, su uso e instalación. No dudes en contactar a nuestro equipo de expertos para asesorarte.