Soldadura plástica en autopartes
La soldadura plástica se ha convertido en una importante aliada del sector automotriz. Antiguamente, los autos eran enteramente metálicos, con muy poca piezas plásticas en su armazón, pero conforme los vehículos se fueron volviendo más aerodinámicos y eficientes, estos fueron migrando del metal al plástico. Y es debido a este cambio que los equipos de soldadura plástica son muy útiles para su reparación y mantenimiento.
Un ejemplo básico: las defensas
Uno de los primeros elementos en cambiar de metal a plástico fueron las defensas de los coches. Esto llevó a 2 beneficios importantes en los autos. El primero es que el metal, al recibir un impacto, transfiere esta fuerza al cuerpo al que está unido. Sí, el metal resiste, pero al mismo tiempo daña las áreas que lo rodean al pasar esta fuerza del golpe. El plástico, en cambio, se deforma y destruye, pero absorbe mucho mejor el impacto. Finalmente, el último beneficio es su peso: al ser una pieza de plástico es más ligera y requiere de menos combustible para mover el auto.
Esta pieza del auto es de las más vulnerables en el momento de un choque, sobre todo porque su diseño “sacrifica” la pieza para la seguridad de los usuarios. Sin embargo, muchas de estas defensas están hecha de TPO, que es un tipo de plástico termoformable. Esta propiedad la hace una candidata perfecta para ser reparada con soldadura plástica.
Pistola de aire caliente: versatilidad y conveniencia
Como todas las maniobras de soldado con plástico, es muy importante tomar en cuenta el material del que está hecha la pieza. Usando el ejemplo anterior, consideremos que es TPO (olefina termoplástica).
Primero, se debe limpiar el área de la ruptura con algún solvente (como el alcohol isopropílico). Un consejo: cuando limpies, siempre hazlo en una sola dirección. Esto debido a que al sólo aplicar la limpieza hacia una dirección evitas re contaminar el área trayendo de vuelta residuos. Una vez limpia, se usa una broca en forma de gota para crear una fisura en forma de V a lo largo de la ruptura.
Fijamos la parte posterior con cinta de aluminio (que es muy resistente y soporta las temperaturas de soldado). Para terminar de preparar el área de soldado, lijamos hasta dejar todo uniforme. Ahora sí: tomamos la soldadura plástica y calentamos la punta para adherirla a la fisura en V. Conforme calentamos el área, empujamos hacia abajo la soldadura, lo que hace que llene mejor la fisura, y luego repetimos el proceso en la parte posterior de la ruptura.
Ya que ambos lados fueron soldados, se aplica una solución epóxica a la fisura. Esto hace que el TPO se adhiera no sólo física, sino químicamente. Al final, se lija toda la pieza y se agrega un promotor de adhesión al plástico soldado para que la pintura del acabado quede perfecta.
Acércate a nuestros expertos para conocer nuestro gran catálogo de equipos. Soldaplas tiene la solución perfecta para tu empresa o negocio.