Errores en la soldadura plástica
A pesar de los muchos beneficios que brinda la soldadura plástica a nuestros procesos y empresas, existe una serie de errores comunes que puede echar abajo todo nuestro esfuerzo. Debemos tomar varias precauciones en el proceso de soldado para asegurarnos que la maniobra quede bien hecha y no provoque problemas a la larga. Revisemos algunos de los puntos importantes del proceso para no caer en estos problemas.
El material
Pareciera muy simple, pero es de suma importancia: siempre debemos conocer a fondo el material al que vamos a aplicar la soldadura plástica. Lo primero y más importante: identificar qué tipo de plástico es.
Si es un plástico termoestable, lo sentimos: estos no se pueden soldar. Los plásticos termoestables a nivel molecular están firmemente unidos entre sí y, al aumentar la temperatura, las cadenas no se mueven sino que sólo se degradan. Algunos ejemplos de este tipo de plásticos son:
- Caucho natural vulcanizado
- Baquelita
- Duroplast
- Urea Formaldehído Espuma (utilizada en imitaciones de madera y tableros)
- Melamina (utilizada en tableros para trabajo)
- Resinas insaturadas de poliéster, que casi siempre se usan reforzadas con fibra de vidrio
- Resina epoxi, utilizada como adhesivo y en plásticos reforzados
- Poliuretanos
- Siliconas
Si, en cambio, nuestro material es un termoplástico, podremos realizarle la soldadura plástica. Pero la soldadura a utilizar debe ser compatible con el plástico a reparar. Una regla muy sencilla es no mezclar peras con manzanas: siempre usa el plástico compatible. Un caso especial es el polietileno, que tiene versiones de baja y alta densidad. En este caso, recuerda: puedes soldar de baja a alta, pero no al revés. Entre los termoplásticos, los más comunes son:
- Polietelino de alta o baja densidad
- Polipropileno
- Poliestireno
- PVC (cloruro de polivinilo)
Las condiciones
Una vez que estás listo con tus materiales compatibles, debes consultar el manual de tu equipo de soldado para saber en qué condiciones se debe operar. Cada tipo de plástico tiene su propia guía de condiciones, por lo que debes consultarla antes de la operación. Algunos equipos solamente controlan la temperatura (como las pistolas de aire caliente). Otros, dependen de temperatura, presión y tiempo (soldadura a tope). Incluso existen equipos digitales que pueden escanear códigos de barras en los materiales por soldar y tendrán pregrabadas las condiciones de operación. Otro aspecto importantísimo es el enfriamiento: si empleas el material soldado antes de que haya pasado su tiempo correcto, las uniones no serán firmes y podrían romperse o deformarse.
El ambiente
Por último, existe una diferencia clara entre soldar en un ambiente cerrado a la intemperie. Los tiempos para alcanzar las temperaturas de operación cambian mucho cuando nos encontramos en condiciones bajo cero. La lluvia puede provocar burbujas dentro de la unión, lo que debilita el área soldada. Por último, el polvo y los desechos tampoco deja que toda la superficie se solde. Siempre trata de mantener las uniones lo más limpias posibles antes de realizar la soldadura.
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