Mini X: extrusora de plástico

 

Las extrusoras de plástico son equipos versátiles que nos facilitan las maniobras cuando se refiere a soldadura plástica. Usualmente son ligeras y maniobrables, por lo que pueden ser utilizadas en una variedad de situaciones diferentes. El día de hoy, conoceremos a fondo una pequeña extrusora: la Mini X de Munsch.

 

Pequeña pero poderosa

La Mini X de Munsch es la más pequeña de su línea de extrusoras, y está diseñada como un equipo de entrada a la categoría. A pesar de no contar con características de sus “hermanas mayores”, la Mini X puede realizar con facilidad tus trabajos de extrusión.

 

Cuenta con una boquilla de precalentado, la cual cumple la función de fundir la soldadura plástica que corre por la nariz de extrusión. Tanto la nariz como la boquilla son removibles. Recuerda que, si has estado operando la extrusora, debes retirar estas piezas con pinzas para evitar una lesión por quemadura. 

 

En la parte trasera de la extrusora viene el panel digital de operación. En él, es posible ajustar el tipo de material con el que se va a trabajar. Una vez elegido, la extrusora se calibra para ciertas condiciones de temperatura de nariz de extrusión y boquilla de aire caliente. Estas dependen de las condiciones pregrabadas de la máquina pero, una vez elegidas, pueden ser ajustadas manualmente para ajustarse a la necesidades de tu material. Incluso, puedes almacenar dichas condiciones como una opción pre grabada personalizada.

 

El equipo tiene incluida una montura para colocar la extrusora. Es importante siempre dejar el equipo en operación sobre esta montura, ya que la temperatura de boquilla o nariz de extrusión podrías quemar materiales en el área de trabajo y provocar un accidente.

 

Operación

Primero, hay que preparar el área para ser soldada. Se deben remover los residuos con un raspador, para luego limpiar el área de trabajo y dejarla lista. Se recomienda utilizar una pistola de aire caliente para reblandecer un poco el área de unión antes de usar la extrusora. 

 

Una vez lista el área de la unión, se debe llenar de soldadura la extrusora. Esta cuenta con un aro guía en la parte posterior, el cual mantiene el cable de la soldadura plástica fijo. La punta del cable se alimenta después en un orificio en la parte posterior del mango.

 

Al presionar el gatillo, el cable es jalado dentro de la extrusora y comienza a fluir la soldadura plástica. El gatillo cuenta con un botón de seguro para mantenerlo presionado, a un costado del mango. Para liberar el seguro, simplemente vuelve a presionar el gatillo. 

 

En Soldaplas contamos con todos los equipos necesarios para ayudarte en todas tus labores de soldadura plástica.